Favorable evolución del sector agroalimentario en la recuperación
El sector agroalimentario ha mantenido un desempeño muy positivo desde los meses más críticos de la pandemia. La producción del sector primario sigue en niveles elevados, la industria alimentaria se está recuperando de la contracción que experimentó en 2020 y los indicadores de demanda muestran una gradual normalización de los patrones de consumo de alimentos, dentro y fuera del hogar. Además, destaca el excelente comportamiento de las exportaciones agroalimentarias, palanca de crecimiento que seguirá siendo clave para el futuro del sector.
En el último año y medio, la evolución del sector agroalimentario ha estado marcada por el impacto de la pandemia en los distintos eslabones de la cadena. Tras una rápida adaptación del sector a los cambios en la demanda de alimentos durante las etapas más duras de la COVID-19, el avance de la campaña de vacunación y la relajación de las restricciones a partir del fin del tercer estado de alarma el 9 de mayo de 2021 han favorecido que los patrones de consumo de alimentos de los hogares españoles y, en consecuencia, también la actividad del sector agroalimentario en general, estén volviendo a la normalidad de forma paulatina.
Empezando por el sector primario, los datos de contabilidad nacional muestran que el valor añadido bruto (VAB) del sector apenas retrocedió en el 1S 2021 respecto al promedio de 2020 (–0,4%), a pesar de que en 2020 creció un fortísimo 5,3%, lo que demuestra un comportamiento anticíclico en relación con el PIB del conjunto de la economía (–10,8%). Si lo comparamos con el nivel de 2019, el avance sigue siendo considerable (+4,9%) y su contribución al conjunto de la economía todavía se sitúa ligeramente por encima de la de antes de la pandemia (3,0% del VAB en el 1S 2021 frente al 3,5% en 2020 y el 2,9% en 2019).
tras los excepcionales avances registrados durante los trimestres más críticos de la pandemia.
La industria agroalimentaria ha tenido una evolución mucho más cíclica, si bien la magnitud de la caída que experimentó en el 2T 2020 y la intensidad de la recuperación posterior son distintas en las dos ramas que la componen (alimentación y bebidas). Así, el descenso de la cifra de negocios de los alimentos elaborados fue mucho más moderada que la de fabricación de bebidas en 2020 (–2,0% frente a –16,2%), por la mayor dependencia de esta última del canal HORECA (hoteles, restaurantes y cafeterías), especialmente castigado por la crisis. Sin embargo, su recuperación en el 1S 2021 fue muy vigorosa, lo que le permitió alcanzar en junio el nivel precrisis, tal y como muestra el siguiente gráfico.
hasta alcanzar el nivel precrisis en términos de la cifra de negocios. Sin embargo, en el mercado laboral la recuperación todavía es incompleta.
El mercado laboral también evoluciona favorablemente en la industria agroalimentaria: el número de afiliados efectivos (esto es, descontando los trabajadores afectados por un ERTE) superó en julio el nivel precrisis. De hecho, la rama de la alimentación empleó en agosto un 2,1% más de trabajadores que en febrero de 2020 (+1,1% respecto a agosto de 2019). En el ámbito de la fabricación de bebidas, en cambio, el empleo efectivo todavía se encontraba en agosto un 2,6% por debajo del registro de febrero de 2019 (–6,7% respecto a agosto de 2019). Asimismo, el porcentaje de afiliados afectados por un ERTE apenas suponía el 0,9% del total en la industria alimentaria en julio de 2021 (unos 3.500 trabajadores), mientras que en la fabricación de bebidas este porcentaje se elevó al 1,8% (unos 850 trabajadores).
En 2020, la pandemia alteró radicalmente el patrón de consumo de alimentos de las familias españolas. Por un lado, el consumo de alimentos y bebidas en el hogar aumentó considerablemente su peso en la cesta de la compra (+3 p. p. hasta el 17,9%).1 Por otro lado, el gasto fuera del hogar (restauración y comedores) descendió un excepcional 40%. En consecuencia, el peso del gasto en restauración representó solamente un 23% del gasto alimentario total (frente al 35% de 2019).
Para analizar la evolución de estas partidas de gasto en lo que llevamos de 2021, nos basamos en datos internos de pagos con tarjetas en TPV de CaixaBank, que permiten diferenciar las tarjetas españolas y las emitidas en el extranjero para aproximar el impacto del turismo internacional en el canal HORECA.
- 1. Datos de la Encuesta de presupuestos familiares (2020) del INE.
y el gasto en restauración ha rebasado los niveles de 2019. Sin embargo, la caída de la demanda extranjera sigue afectando a los productos destinados al canal HORECA.
El gasto con tarjetas españolas en supermercados y grandes superficies de alimentación aumentó un significativo 34% en 2020, tal y como recoge el siguiente gráfico. Esta tónica se ha mantenido en lo que llevamos de 2021 (+40% entre enero y agosto de 2021 en relación con el mismo periodo de 2019) y pone en evidencia que la situación sanitaria todavía no está normalizada y sigue favoreciendo la compra de alimentos para el consumo en el hogar.2 Por otra parte, el gasto con tarjetas españolas en restaurantes se ha recuperado con vigor en 2021 (creció un 26% en el acumulado de enero a agosto respecto al mismo periodo de 2019), especialmente durante los dos meses de verano (un 46% respecto a julio y agosto de 2019) gracias a la relajación de las restricciones, el auge del turismo doméstico en detrimento de los viajes internacionales y el afloramiento de parte de la demanda embalsada y el ahorro acumulado por los hogares durante los meses de mayores restricciones.3
No obstante, el gasto con tarjetas extranjeras en restauración ha sufrido un duro golpe y su recuperación todavía es incompleta. Con todo, en verano se ha producido una mejora notable en este ámbito (–9% respecto a julio y agosto de 2019 frente al –60% en el 1S 2021 respecto al mismo periodo de 2019). El estado avanzado de la vacunación en gran parte de los principales países de origen de los turistas que visitan España permite ser optimistas respecto a las perspectivas de recuperación del turismo internacional en los próximos trimestres y en 2022 el sector turístico podría alcanzar un nivel de actividad similar al de 2016 (un 15% inferior al de 2019).
- 2. Estas cifras también se ven afectadas por la sustitución del efectivo por pago con tarjeta, una cuestión que se analiza en detalle en el artículo «La sustitución del efectivo por la tarjeta como medio de pago durante la pandemia» disponible en https://www.caixabankresearch.com/es/economia-y-mercados/actividad-y-crecimiento/sustitucion-del-efectivo-tarjeta-como-medio-pago?993
- 3. Para más detalles, véase el artículo «Demanda embalsada: una de las principales palancas de la recuperación económica», disponible en https://www.caixabankresearch.com/es/economia-y-mercados/actividad-y-crecimiento/demanda-embalsada-principales-palancas-recuperacion
España es una gran potencia exportadora de productos agroalimentarios: ocupa la cuarta posición en la UE y la séptima a nivel mundial.4 Durante la pandemia, las exportaciones agroalimentarias han acelerado el paso, creciendo un 4,0% en el conjunto de 2020 y un 10,4% interanual en el 1S 2021. Así, el sector agroalimentario aporta un 19,5% de las exportaciones de bienes de España, 2 puntos más que en 2019. Las importaciones agroalimentarias, en cambio, descendieron en 2020, y a pesar de aumentar en el 1S 2021, el superávit exterior de bienes agroalimentarios alcanzó un récord histórico en junio: un 1,7% del PIB (frente al 1,6% en 2020 y el 1,1% en 2019).
- 4. Según el ranking por países exportadores de productos alimentarios de la Organización Mundial del Comercio de 2019 (último año disponible).
y han generado un superávit exterior del 1,7% del PIB. Durante 2020, las exportaciones de carne de porcino a China han crecido un extraordinario 136%.
Una parte muy significativa del incremento de las exportaciones españolas se debe al extraordinario incremento de las exportaciones de carne de porcino a China (+136% en 2020). Esta partida explica unos 2,9 puntos del crecimiento del 4,0% que experimentaron las exportaciones agroalimentarias totales en 2020, a causa del fuerte aumento de la demanda internacional por la peste porcina africana que afecta a gran parte de la producción china. El resto de las exportaciones agroalimentarias también crecieron, pero de forma más modesta (+1,1% en 2020). En el 1S 2021, el incremento de las exportaciones de porcino a China sigue siendo muy elevado (+60% en el 1S 2021 respecto al mismo periodo de 2020), pero su contribución al crecimiento se ha moderado: 2,1 puntos del avance del 10,4%. Exploramos las razones que explican este repunte en el artículo «El sector porcino español atraviesa su momento más dulce» de este mismo Informe Sectorial.
Exportaciones agroalimentarias por grupos de productos
Además de la carne de porcino, hay otros productos que destacan por su excelente comportamiento tanto en 2020 como en lo que va de 2021, como son las preparaciones alimenticias para animales, algunas frutas y hortalizas (albaricoques, pepinos, coles, etc.) y productos de panadería. Todos estos productos se encuentran en el área verde oscuro del gráfico que se muestra a continuación. Otros productos, como los cítricos y las conservas de pescado, anotaron un notable avance en 2020 (por la mayor demanda de alimentos de fácil conservación) y en 2021 siguen en positivo, aunque su ritmo de crecimiento ha bajado. Por otra parte, las exportaciones de vino,5 aceite de oliva y otras hortalizas (como la lechuga) descendieron en 2020, pero se están recuperando vigorosamente en 2021 (área verde claro). Finalmente, hay un grupo reducido de productos (como el pescado fresco y congelado) cuyas exportaciones descendieron en 2020 y todavía siguen en retroceso, aunque más moderado (productos en el área roja del gráfico). En este último caso, el deterioro de la balanza comercial de pescado fresco y congelado no responde a los efectos de la pandemia, sino a factores estructurales anteriores.
- 5. Analizamos en detalle el sector vitivinícola en el artículo «El sector del vino español: símbolo de tradición y referente mundial» de este mismo Informe Sectorial.
Exportaciones agroalimentarias
Variación en el 1S 2021 (respecto al 1S 2019)
De cara a futuro, las exportaciones seguirán siendo una palanca de crecimiento para el sector. Por ello, es primordial seguir impulsando la sostenibilidad de los procesos productivos de los alimentos, especialmente en el sector primario, para mitigar el impacto medioambiental que esta actividad conlleva, un aspecto que analizamos con más detalle en el artículo «Avanzando hacia la sostenibilidad del sector agroalimentario» en este mismo Informe Sectorial.