La sequía en Cataluña ¿ha modificado el gasto en agua de los hogares?

A partir de datos internos y técnicas big data, analizamos el consumo de agua de los hogares catalanes entre 2021 y 2024, tras la declaración de sequía.

Contenido disponible en
Grifo de agua. Foto de Jennifer Grismer en Unsplash

Con el otoño a punto de llegar a su fin, la situación hidrológica en Cataluña se mantiene en estado de alerta a causa de la sequía persistente que afecta a las provincias de Barcelona, Girona y parte de Tarragona. La situación hi­­drográfica en esta área de Cataluña, que corresponde a las cuencas internas abastecidas principalmente por las aguas de los ríos Ter y Llobregat, contrasta con la del territorio abastecido por el río Ebro. La situación de estrés hí­drico empezó en 2021 y alcanzó su punto crítico en 2023, cuando la mayoría de los municipios de las cuencas internas se declararon en estado de excepcionalidad por sequía. Este estado se activa cuando el nivel de reservas de agua desciende por debajo del 25%, indicando un estrés hídrico severo (véase el primer gráfico). En este artículo, analizamos hasta qué punto los hogares catalanes tomaron medidas para enfrentar la escasez de agua tras la declaración de sequía en sus correspondientes municipios entre 2021 y 2024. Utilizando datos detallados de recibos de agua domiciliados, hemos podido observar que los hogares catalanes redujeron su gasto de agua en respuesta a la sequía. La reducción del gasto en agua, además, varió en función del nivel de emergencia hídrica y se mantuvo a lo largo del tiempo.

Estado hidrográfico en Cataluña (cuencas internas)

Para este análisis, utilizamos datos internos de recibos de agua domiciliados en cuentas de CaixaBank, debidamente anonimizados, que proporcionan información sobre el importe pagado en cada recibo, la compañía suministradora y características de los clientes titulares de la cuenta como la edad, los ingresos y el municipio de residencia. Esta información la combinamos con datos hidrográficos (red y cuenca de abastecimiento, estado de sequía, precio del agua) y climáticos (temperatura, precipitaciones, nivel de humedad) del municipio al que pertenecen para estudiar los determinantes del consumo de agua de los hogares catalanes.1 De esta manera, obtenemos una fuente de información innovadora para estudiar cómo los hogares modificaron su gasto en agua como respuesta a la situación hidrográfica.

El recibo de agua mediano se sitúa alrededor de 48 euros en las cuencas internas y de 40 euros en las cuencas del Ebro (es decir, la mitad de los hogares pagan facturas inferiores y la otra mitad, superiores). Sin embargo, el gasto de agua es muy heterogéneo (véase el segundo gráfico) y hay otros factores que afectan al gasto en agua más allá del estado de sequía, como, por ejemplo, la estructura del hogar o los precios del agua.2 Para analizar si los hogares cambiaron su gasto en función del estado hidrográfico en cada momento, es necesario tenerlos en cuenta. Para ello, estimamos un modelo econométrico que incluye estos factores3 así como el estado hidrográfico en cada momento. De nuestros resultados se desprende que una mayor gravedad en el estado de emergencia en las cuencas internas está asociada con una reducción del gasto de agua de en­­tre un 1,5% y un 4%, una vez controlado por los precios en cada momento (véase el tercer gráfico).4 Estos resultados coinciden con otros estudios,5 que estimaron el im­­pacto en el área metropolitana de Barcelona de otro episodio de sequía (2004-2012), y muestran que los hogares re­­dujeron su consumo al aumentar el nivel de estrés hídrico.

  • 1. En concreto, la muestra de datos incluye todos los clientes particulares en Cataluña con recibos de agua domiciliados con frecuencia bimensual o trimestral entre marzo de 2021 y septiembre de 2024. La información sobre los precios de cada compañía suministradora de agua proviene de la Agència Catalana de l’Aigua (ACA). La información hidrográfica y del estado de sequía a nivel de unidad de explotación proviene de la ACA para las cuencas internas y de la Confederación Hidrográfica del Ebro para las del Ebro. La información climática a nivel municipal proviene de Copernicus Climate Change Service (C3S) Climate Data Store (CDS).
  • 2. Reynaud, A. (2015). «Modelling Household Water Demand in Europe: Insights from a Cross-country Econometric Analyses of EU-28». Luxemburgo: Publication Office of the European Union. 249 p.
  • 3. En concreto, estimamos una regresión lineal con efectos fijos de alta dimensión (HDFE, por sus siglas en inglés) que incluye características del hogar (ingresos, edad del titular, número de recibos e importe del recibo anterior), meteorológicas (humedad, temperatura y precipitaciones del municipio), los precios y el nivel de sequía. Además, la especificación también incluye efectos fijos de hogar, municipio y mes del año.
  • 4. En las cuencas del Ebro, esta asociación es más débil, puesto que el nivel de estrés hidrográfico en el periodo analizado no alcanzó una gravedad similar al de las cuencas internas durante el mismo periodo.
  • 5. Bernardo, V., Fageda, X. y Termes, M. (2015). «Do droughts have long-term effects on water consumption? Evidence from the urban area of Barcelona». Applied Economics, 47(48), 5131-5146.
Importe del recibo de agua domiciliado en Cataluña, por cuenca hidrográfica
Variación en el importe del recibo asociada a una mayor necesidad hídrica

Sin embargo, esta metodología puede ofrecer una visión distorsionada del impacto de la sequía al agrupar en un mismo estado de sequía a municipios que acaban de entrar y otros que llevan más tiempo en dicha situación. Para mejorar la estimación del impacto de la declaración de sequía sobre el consumo de agua, usamos un método de diferencias en diferencias (DiD),6 que nos permite evaluar el impacto de una intervención comparando los cambios entre un grupo tratado en un periodo concreto y un grupo de control. En este caso, el tratamiento es la entrada de un municipio en la fase de alerta o superior y el control a aquellos municipios que no están en fase de alerta o superior.

Los resultados muestran que, efectivamente, tras la de­­cla­­ración de sequía en un municipio, sus habitantes redujeron el gasto en agua durante los meses posteriores. El impacto durante los 12 meses posteriores a la declaración de sequía es de alrededor de un 5% sobre el gasto. Como podemos observar en el gráfico, este impacto es gradual y llega a su punto máximo seis meses después de la entrada en sequía, con una reducción de casi el 10%. A partir de los seis meses, el efecto de la intervención se modera. Este resultado, además, se mantiene si tenemos en cuenta otros factores como la renta media del municipio, los precios del agua o el mes del año en el que se realizó el consumo.

  • 6. Callaway, B. y Sant’Anna, P. H. (2021). «Difference-in-differences with multiple time periods». Journal of Econometrics, 225(2), 200-230.
Impacto en el consumo de agua de la declaración de sequía

En conclusión, el uso de datos innovadores que combinan información del gasto de agua con el estado hidrográfico nos ha permitido constatar cómo los hogares catalanes han reducido de manera significativa el consumo de agua durante el episodio de sequía actual.

    Temas clave

    Cambio climático y transición verde

    ¿Qué políticas se acometerán para frenar el cambio climático? ¿Qué implicaciones tiene para todos los agentes implicados la transición verde hacia una economía más sostenible?