La economía china cumple objetivos en 2023. ¿Y en 2024?
El PIB de China creció un 1,0% intertrimestral en el 4T 2023, lo que supone una desaceleración tras el 1,5% alcanzado en el 3T 2023 (revisado 0,2 p. p. al alza). Por su parte, el crecimiento interanual aceleró hasta el 5,2%, tras el 4,9% anterior, si bien parte de este resultado estaría afectado por efectos base derivados de las políticas de COVID cero, que concluyeron en diciembre de 2022. En balance, China creció un 5,2% en 2023, en línea con la previsión de CaixaBank Research, y ligeramente por encima del objetivo del 5,0% establecido por el Gobierno.
17 de enero de 2024
Dato
- El PIB de China creció un 5,2% interanual en el 4T 2023, lo que situó el crecimiento del conjunto de 2023 en el 5,2%, ligeramente por encima del objetivo oficial del 5,0%.
- En términos intertrimestrales, el PIB creció un 1,0%, tras el 1,5% del 3T 2023 (revisado desde el 1,3%).
- Los indicadores de actividad apuntan a un 4T relativamente dinámico en casi todos los ámbitos, destacando el buen tono de la industria y la recuperación de las exportaciones al final del año.
Valoración
- El PIB de China creció un 1,0% intertrimestral en el 4T 2023, lo que supone una desaceleración tras el 1,5% alcanzado en el 3T 2023 (revisado 0,2 p. p. al alza). Por su parte, el crecimiento interanual aceleró hasta el 5,2%, tras el 4,9% anterior, si bien parte de este resultado estaría afectado por efectos base derivados de las políticas de COVID cero, que concluyeron en diciembre de 2022. En balance, China creció un 5,2% en 2023, en línea con la previsión de CaixaBank Research, y ligeramente por encima del objetivo del 5,0% establecido por el Gobierno.
- Los indicadores de actividad muestran una reactivación a cierre del 4T. Así, las ventas minoristas crecieron un 7,4% interanual en diciembre y situaron el avance medio interanual del 4T en el 8,4%, frente al 4,2% del 3T. Por otro lado, la producción industrial mostró un claro comportamiento de «menos a más» a lo largo del trimestre, alcanzando un crecimiento interanual del 6,8% en diciembre, que sitúa su nivel en máximos desde febrero de 2022. Esta favorable evolución de la industria refleja el impacto de las políticas de recorte de precios en sectores como el automovilístico y de tecnologías verdes con el objetivo de ganar cuota de mercado internacional en el actual contexto de desaceleración global. Pese a este renovado vigor en la industria, la inversión en activos fijos ha mostrado un comportamiento bastante discreto a lo largo del año, que se ha traducido en un avance en el conjunto de 2023 del 3,0%, tras el 5,1% de 2022. Respecto al sector exterior, destaca la reactivación de las exportaciones en diciembre, con un crecimiento del 2,3% interanual, el mejor resultado desde abril. Con todo, en media de 2023, las exportaciones han caído un 5,0% respecto al año previo. Por su parte, las importaciones crecieron un modesto 0,2% interanual en diciembre, dejando el balance del año con una caída del 5,0%.
- En materia de precios, el menor ritmo de caída interanual de los precios de los alimentos y de la energía alivió el escenario de deflación en diciembre, tanto en los precios al consumo (–0,3% vs. –0,5% interanual en noviembre), como en los de producción (–2,7% vs. –3,0% interanual en noviembre). No obstante, las perspectivas de desaceleración que se manejan para los próximos meses apuntan a que los riesgos deflacionistas persistirán, lo que abre la posibilidad a que se apliquen una política monetaria y fiscal algo más expansivas.
- Persisten los riesgos a la baja en el crecimiento para los próximos meses debido a los problemas que aquejan al sector residencial. Es cierto que la relajación de regulaciones en el sector inmobiliario y la reactivación de la política fiscal, a través principalmente de la inversión en infraestructuras, a lo largo de los últimos meses, parece haber logrado mantener el crecimiento del gigante asiático y ha garantizado que se alcanzara el objetivo oficial de crecimiento para 2023 del 5,0%. Sin embargo, persisten riesgos a la baja a corto plazo y el proceso de ralentización estructural de la economía china seguirá dificultando el hecho de que China mantenga el ritmo de crecimiento observado hasta la fecha. A corto plazo, aunque la turbulencia en el sector inmobiliario parece haberse calmado en los últimos meses, el sector calificado como «más importante del mundo» antes de la crisis de 2021 seguirá en proceso de ajuste. En este contexto, los «deberes» del Ejecutivo chino seguirán en 2024: evitar que la crisis de confianza (y de liquidez) arrastre a otros sectores, como el sector financiero, y a las finanzas de los Gobiernos locales. Relacionado con esto, un reto más a medio plazo será el desarrollo de un modelo de crecimiento más anclado en el consumo interno y menos en la inversión y las exportaciones. A estas dificultades se sumarán los riesgos de la fragmentación económica y sus implicaciones para las cadenas de valor de productos y sectores más punteros, que podrán mermar las perspectivas de crecimiento del gigante asiático (y del resto del mundo) a medio plazo.
- Tras la publicación del dato del 4T 2023, mantenemos sin cambios nuestra previsión de crecimiento de la economía china para 2024, en torno al 4,6%, en línea con la media del consenso de Bloomberg.
Última actualización: 19 enero 2024 - 13:12