El crecimiento del PIB en EE. UU. sigue desacelerándose, aunque con algún brote verde

Según el primer avance publicado, el PIB estadounidense moderó su ritmo de expansión en el 1T 2023 y lo hizo en una mayor magnitud de lo previsto. En concreto, la economía registró un avance intertrimestral del 0,3%, lo que representa el ritmo de crecimiento más modesto desde hace un año y frente al 0,5% esperado por el consenso de analistas (según Bloomberg). Sin embargo, al examinar la apertura del PIB por componentes se puede considerar que el dato es mejor de lo que parece a simple vista, pues la pérdida de dinamismo se debió mayoritariamente a una contribución negativa de la variación de existencias, un componente con elevada volatilidad y que no aporta mucha información sobre el pulso de la actividad económica, y a un repunte en las importaciones. De hecho, el consumo privado aceleró su crecimiento (del 0,3% intertrimestral del 4T 2022 al 0,9%), apoyado por la fortaleza del mercado laboral y el ahorro embalsado, y la inversión fija bruta se contrajo menos que en los últimos trimestres (-0,1%).

Ricard Murillo Gili
27 de abril de 2023
PIB EEUU
Dato
  • En el 1T 2023, el PIB de EE. UU. creció un 0,3% intertrimestral (1,1% anualizado), lo que representa un menor ritmo de avance que en el trimestre anterior (0,6% intertrimestral y 2,6% anualizado).
  • La tasa de variación interanual se situó en el 1,6% en el 1T 2023 (0,9% en el 4T 2022).
  • En el balance del año, esperamos que el PIB se expanda en un 0,9%, tras el 2,1% en 2022.
Valoración
  • Según el primer avance publicado, el PIB estadounidense moderó su ritmo de expansión en el 1T 2023 y lo hizo en una mayor magnitud de lo previsto. En concreto, la economía registró un avance intertrimestral del 0,3%, lo que representa el ritmo de crecimiento más modesto desde hace un año y frente al 0,5% esperado por el consenso de analistas (según Bloomberg). Sin embargo, al examinar la apertura del PIB por componentes se puede considerar que el dato es mejor de lo que parece a simple vista, pues la pérdida de dinamismo se debió mayoritariamente a una contribución negativa de la variación de existencias, un componente con elevada volatilidad y que no aporta mucha información sobre el pulso de la actividad económica, y a un repunte en las importaciones. De hecho, el consumo privado aceleró su crecimiento (del 0,3% intertrimestral del 4T 2022 al 0,9%), apoyado por la fortaleza del mercado laboral y el ahorro embalsado, y la inversión fija bruta se contrajo menos que en los últimos trimestres (-0,1%).
  • Si miramos todavía más de cerca el detalle de la inversión, vemos como su contracción intertrimestral se debió a la octava caída consecutiva del componente de la inversión residencial, especialmente sensible al endurecimiento monetario. En cuanto al comportamiento del sector exterior, tanto las exportaciones como las importaciones aumentaron con fuerza, si bien en su conjunto, la contribución de la demanda externa al crecimiento del PIB fue casi nula.
  • La evolución de los indicadores económicos mensuales sugieren que la dinámica de la actividad siguió un patrón de “más a menos” a lo largo del trimestre. Por ejemplo, tanto las encuestas del ISM de servicios como de manufacturas, así como los indicadores de confianza de los hogares, mostraron una modesta tendencia a la baja a lo largo del 1T, si bien en niveles no muy distintos a los del trimestre anterior. Con todo, pese a la sorpresa positiva frente a las expectativas que tenía la mayoría de los analistas al arranque del año, los datos sugieren una economía que ha ido perdiendo dinamismo en los últimos meses, de la mano de los efectos del endurecimiento monetario y las turbulencias financieras a finales del trimestre.
  • Asimismo, los datos ya disponibles de abril muestran una continuidad en esta tendencia anémica en el sentimiento económico, lo que apunta a que el crecimiento del PIB en lo que resta de año tenderá a moderarse aún más, pudiéndose estancar o incluso contraer en los últimos trimestres del año. En este contexto de gradual enfriamiento de la economía, creemos que la Reserva Federal podría considerar finalizar pronto la subida de los tipos de interés oficiales. En concreto, pensamos que la semana que viene la Fed los subirá hasta el intervalo 5,00%-5,25%, cuando se pausará antes de iniciar el recorte de estos a finales de año o principios de 2024.
  • En los mercados financieros, los inversores pusieron el foco en las señales de persistencia en las presiones inflacionistas en el reporte de las cuentas nacionales del 1T, que mostró un repunte en la variación intertrimestral del deflactor subyacente (excluyendo energía y alimentos) del consumo privado (4,9% en el 1T desde el 4,4% en el trimestre anterior, expresado en términos anualizados), la métrica favorita de la Reserva Federal. En ese sentido, la rentabilidad de la deuda soberana se incrementó (+6 p. b. hasta el 3,5% para el bono estadounidense con vencimiento a 10 años, +10 p. b. hasta el 4,1% para el bono a 2 años) mientras el dólar se apreció ligeramente frente a las principales monedas (en torno al 1,10 en su cruce con el euro). Por su parte, la renta variable mantenía el buen momento tras la publicación de unos resultados corporativos sólidos en las empresas tecnológicas, con avances a inicio de la jornada en los principales índices bursátiles (+0,9% para el S&P 500, +1,3% para el NASDAQ y +0,2% para el EuroStoxx 50).

EE. UU.: PIB. Abril 2023

Última actualización: 28 abril 2023 - 15:20
Ricard Murillo Gili
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