Extremadura

• Con poco más de 1 millón de habitantes (2,2% de la población total del país), Extremadura es la quinta región menos poblada.
• El PIB extremeño asciende a 22.531 millones de euros, el 1,7% del PIB español, de modo que es la tercera región con menor peso en el total nacional.
• El PIB per cápita se sitúa en 21.343 euros, el segundo más bajo de todas las regiones y un 24,2% inferior a la media española. Los avances en los últimos años son fruto, sobre todo, del retroceso demográfico.
• En términos de especialización productiva, Extremadura sobresale por su potente sector agrario, que aporta el 7,7% de su PIB (2,6% de media nacional); también destacan la industria extractiva (8,6% vs. 4,9% en España) y los servicios públicos (26,1% vs. 17,8%). En cambio, es notablemente inferior el peso de la industria manufacturera (7,2% vs. 12,5%) y de los servicios ligados a la industria (20,9% vs. 28,5%).
• Aunque ha aumentado de forma apreciable el peso de las exportaciones de mercancías en el PIB regional en los últimos años, apenas representa el 13,2%, muy lejos del promedio español (28,9%) y el porcentaje más bajo de las regiones peninsulares. En 2023 exportó bienes por 3.022 millones de euros, solo el 0,8% de las exportaciones españolas; casi la mitad de los bienes exportados proceden del sector agroalimentario, sobre todo frutas y legumbres (28,3%). Además, la quinta parte del tabaco que exporta España se origina en esta región.

Extremadura está siendo una de las regiones menos dinámicas del país. En 2023 estimamos un crecimiento del PIB del 1,6% (2,5% en España). El gasto de los hogares se vio afectado por el aumento de precios y tipos de interés, la incertidumbre y el frenazo del empleo. Además, la sequía y los costes energéticos impactaron en el sector agroalimentario, vital para la región.

Desde CaixaBank Research prevemos un crecimiento del PIB extremeño para 2024 del 1,2%, inferior al del conjunto del país (1,9%), con lo que sería la única región que no habrá recuperado aún los niveles prepandemia. Si bien la sequía podría seguir lastrando la producción agraria, esperamos una mejora del empleo y el consumo, en un contexto de distensión de los precios y la política monetaria. Asimismo, la actividad podría beneficiarse de una mayor ejecución de fondos NGEU.

Extremadura está siendo una de las regiones menos dinámicas en términos de empleo. En 2023, la afiliación creció a un ritmo muy inferior a la media española (1,1% vs. 2,7%) y en marzo de este año, un 0,9% interanual (vs. 2,6%): el avance en hostelería y sanidad contrasta con la fuerte destrucción en Administración pública. De este modo, los niveles actuales superan en un 3,9% los del mismo mes de 2019 (+9,8% para el conjunto de España). Por su parte, la región presenta la segunda tasa de paro más alta del país: 16,3% en el 4T 2023, 4,5 puntos más que la media de España, aunque mejora notablemente los registros prepandemia (23,5% en el 4T 2019).

Los indicadores de consumo están mostrando un comportamiento más débil en Extremadura que en el conjunto del país. Tras la fuerte caída de 2022, las ventas minoristas (en volumen), afectadas por el repunte de la inflación, no levantaron cabeza el año pasado (–0,3% vs. +2,9% en España) y apenas crecen un 1,9% interanual en los dos primeros meses de 2024, tasa inferior a la media (3,2%), de modo que se mantienen por debajo de los niveles de 2019 (–3,3% vs. +3,5%).

La producción industrial, poco relevante en la región, anotó en 2023 uno de los mayores crecimientos del país, un 4,7%, en contraste con la caída del 1,4% en España. En enero de este año el ritmo se acelera hasta el 5,3% interanual (vs. 3,6%), de modo que supera ampliamente, en un 8,4%, los niveles de 2019 (vs. –2,4%).

Dentro de un tono de debilitamiento generalizado por regiones, las exportaciones extremeñas de mercancías están teniendo un comportamiento muy positivo. En 2023 crecieron un 1,5% (–1,4% en España), gracias al tirón de las ventas de productos químicos y del sector agroalimentario, en especial frutas, legumbres y preparados alimenticios, mientras que en enero de este año se aceleran con fuerza y crecen un 28,7% interanual (vs. –2,5%) y un 58,1% respecto a 2019 (vs. +29,5%).