Portugal: la actividad mantiene un buen tono en el 2T
La información disponible para el 2T sugiere un desempeño más positivo de lo anticipado para la economía portuguesa. En este contexto, consideramos que hay margen para una leve mejora en nuestras proyecciones de crecimiento.
La información disponible para el 2T sugiere un desempeño más positivo de lo anticipado previamente, gracias al consumo y al turismo. Los indicadores de consumo privado (ventas minoristas, ventas de automóviles y pagos con tarjeta) mostraron una notable solidez en mayo, respaldados por un mercado laboral resistente. Adicionalmente, los indicadores relacionados con el turismo continúan mostrando un fuerte dinamismo, con el número de turistas y de vuelos significativamente por encima de los niveles de 2019. Todo ello está teniendo su reflejo en el indicador de sentimiento económico, que en junio mejoró entre los consumidores y en los sectores de la construcción y de los servicios. Se espera que estas tendencias se mantengan activas en la segunda mitad del año, a lo que se podría sumar el impulso de la inversión procedente de los fondos europeos. En este contexto, consideramos que hay margen para una leve mejora en nuestras proyecciones de crecimiento.
El avance del IPC sitúa la inflación de junio por debajo del 4% (3,4%), algo que no sucedía desde enero de 2022. La inflación subyacente también descendió, hasta el 5,2%, pero de forma más moderada (5,4% en mayo). Los efectos base en energía (que seguirán siendo fuertes en julio) y la caída interanual de los precios de producción respaldan la tendencia a la baja.
En términos acumulados de 12 meses hasta marzo, se situó en el 0,4% del PIB, en contraste con el –0,6% registrado en 2022, como consecuencia de la mejora en Administraciones públicas y empresas. En el caso de los hogares, la capacidad de financiación siguió reduciéndose, hasta el 0,4% del PIB, lo que reflejó fundamentalmente la reducción del ahorro, hasta el 5,9% de la renta disponible, nivel comparable con los observados en 2008.
El superávit del 1,2% del PIB refleja la fortaleza del mercado laboral y el dinamismo de la actividad. De hecho, el aumento interanual de los ingresos por impuestos y las contribuciones sociales superó el aumento del consumo y la inversión pública. En términos acumulados de 12 meses, el superávit del 0,1% del PIB contrasta con el déficit del 0,4% al cierre de 2022.
En el 1T 2023, el índice de precios de la vivienda (IPV) creció un 1,3% trimestral, un ritmo superior al del trimestre precedente (1,1%) y un 8,7% interanual, pese a que las compraventas se redujeron más de un 20%. Otros indicadores referentes ya al 2T del año apuntan que el mercado inmobiliario se mantiene resiliente pese a la subida de los tipos de interés. Así, en mayo, el valor medio por metro cuadrado de las tasaciones ascendió a 1.510 euros, 19 euros más que en abril.