La Fed y el petróleo barato seguirán apoyando el crecimiento mundial
El crecimiento global cuenta con el apoyo de una política monetaria laxa y del bajo precio del petróleo. Aunque la Reserva Federal (Fed) dejó claro en la reunión de junio que empezará a subir el tipo de interés próximamente, también introdujo un importante matiz respecto al ritmo con el que irá endureciendo la política monetaria. Así, según el comunicado de la Fed, todo apunta a que las condiciones financieras seguirán siendo acomodaticias durante un largo tiempo. Esta circunstancia supondrá un importante respaldo para el crecimiento mundial, en especial para los países emergentes con un cuadro macroeconómico poco equilibrado, como Turquía y Sudáfrica, y los que se encuentran en recesión, como Brasil y Rusia. Por otro lado, también será de ayuda, particularmente para las economías avanzadas y para gran parte de las emergentes, el mantenimiento del nivel de producción de petróleo por parte de la OPEP, que seguirá favoreciendo los bajos precios del crudo.
ESTADOS UNIDOS
El PIB tuvo un retroceso mínimo en el 1T 2015, según la segunda revisión que efectúa mensualmente el Bureau of Economic Analysis. El avance publicado (del 0,1% intertrimestral) registró un descenso nimio a causa de un sector exterior que lastró el crecimiento más de lo que se había estimado en la primera entrega, en parte por la huelga portuaria del 1T. El crecimiento interanual quedó en el 2,9%, aunque lo más destacable de esta tercera entrega fue la ligera revisión al alza del consumo privado. Ratificaron esta fuerza del consumo los datos de las cuentas nacionales de mayo, que registraron una subida intermensual del 0,6% del gasto en consumo personal, y una mejora de la renta de los hogares más sólida que la de abril. Las ventas minoristas de mayo también se mostraron fuertes, y la percepción del momento actual que mide el índice de confianza del consumidor del Conference Board es asimismo positiva y se sitúa cerca de los niveles de 2006.
El mal dato del 1T fue consecuencia de factores transitorios y metodológicos. Los últimos análisis de la Fed concluyen que el Bureau of Economic Analysis tiende a subestimar el crecimiento de los primeros trimestres (véase el Focus «El PIB de EE. UU. en el 1T: mejor de lo que parece»). También contribuyeron de manera negativa al crecimiento la mencionada huelga y unas condiciones meteorológicas excepcionalmente crudas a inicios de año, cuyas consecuencias se manifestaron en componentes como la construcción y la inversión en infraestructuras. En particular, esta última retrocedió un 5,1% intertrimestral, el peor registro desde 2010.
Los indicadores de actividad recientes apoyan la hipótesis de una mejora de la construcción en el 2T. Se confirma la recuperación del sector de la construcción después del descenso de la actividad de los primeros meses del año a causa del mal tiempo. Así, el generoso gasto en construcción de abril, especialmente en el sector industrial, supuso una reacción esperada tras la atonía del 1T. Asimismo, la cifra de viviendas iniciadas se situó en mayo un 15,1% por encima del registro de febrero, a pesar de descender respecto al mes de abril. Los índices de sentimiento empresarial (ISM) también continúan en la zona expansiva. El ISM de manufacturas, que en los últimos meses había sufrido el retroceso de la inversión en petróleo y en carbón, sumó en mayo su segundo avance consecutivo y se situó en los 52,8 puntos, cifra que se corresponde con crecimientos del PIB cercanos al 3%. El ISM de servicios tuvo un ligero retroceso en mayo, pero el nivel actual, de 55,7 puntos, coincide con crecimientos de la economía superiores al 3%.
El empleo vuelve a mostrarse robusto. En mayo se crearon 280.000 puestos de trabajo netos, un registro por encima de lo esperado y del nivel de los 200.000, indicativo de un mercado fuerte. El aumento de la tasa de actividad provocó que la tasa de paro subiera una décima hasta el 5,5% de la población activa. La tasa amplia de desempleo (U6), que incluye el subempleo (personas que trabajan a tiempo parcial por razones económicas pero que querrían hacerlo a tiempo completo), permaneció en el 10,8%, tras varios meses de descensos. En este sentido, los salarios avanzaron un todavía moderado 2,3% interanual en mayo. Con todo, los puestos vacantes superaron a las contrataciones, que crecen a un ritmo considerable, hecho que podría marcar el inicio de una recuperación más consistente de los salarios.
La inflación subyacente se desacelera. El IPC de mayo subió un 0,4% con respecto al mes anterior y un 0,0% interanual, resintiéndose todavía del efecto de base de la caída del precio del petróleo. Más relevante es el hecho de que el índice subyacente, que excluye los precios de los alimentos y de los bienes energéticos, se desacelerara con un incremento intermensual del 0,1%, el menor en lo que va de año (1,7% interanual, una décima menos que en abril). La ralentización del índice subyacente sin los alquileres imputados, que subió un 0,9% interanual, y del deflactor de mayo del gasto del consumo personal subyacente (el índice de precios que la Fed toma como referencia), que subió un 1,2% interanual, también ilustra la moderada inflación. Pese a ello, la Fed reiteró en la reunión del 17 de junio su intención de efectuar dos subidas del tipo de interés de referencia antes de finales de enero. El ritmo de subidas será, sin embargo, más lento de lo que se había anunciado.
JAPÓN
Revisión al alza del PIB del 1T 2015. La economía japonesa creció un 0,9% intertrimestral en el 1T 2015, claramente por encima del 0,6% previamente anunciado. La variación interanual marcó un retroceso del 1,0% (frente al –1,4% anterior). La práctica totalidad de la revisión, en términos absolutos, se debe a la mejora de la inversión en equipo, que pasó de crecer un 0,4% a un 2,7% intertrimestral. Pese a tratarse de un buen dato, el ciclo de existencias desfavorable, la volatilidad del componente inversor y, especialmente, la debilidad del consumo privado nos impiden que traslademos toda la subida que correspondería a nuestra previsión para 2015, que pasa del 0,8% al 1,0%.
El consumo privado sigue siendo una asignatura pendiente. El éxito de las políticas expansivas de Shinzo Abe, conocidas como Abenomics e iniciadas a principios de 2013 para sacar a Japón del ciclo deflacionista y lograr un mayor crecimiento, basado en el consumo privado, todavía no está asegurado. Las medidas incluían una expansión fiscal, una política monetaria acomodaticia sin precedentes y unas reformas estructurales procrecimiento que siguen sin concretarse. Dos años y medio después, el patrón de crecimiento no ha cambiado: las exportaciones y las importaciones son los componentes que más han avanzado (las primeras, favorecidas por la depreciación del yen y la recuperación de la economía global, y las segundas, por los esfuerzos de reconstrucción tras Fukushima y las compras energéticas) y el consumo privado apenas ha variado.
Los precios subieron en mayo algo más de lo esperado, pese al componente energético. El IPC general creció un 0,5% interanual y el IPC sin alimentos pero con energía (la referencia del Banco de Japón) subió un 0,1% interanual, por encima del 0,0% de abril. Aun así, a corto plazo, los precios energéticos seguirán presionando el índice a la baja.
EMERGENTES
China evoluciona hacia un modelo de crecimiento más moderado y sostenible. El Fondo Monetario Internacional (FMI), en su informe sobre la economía china, constata que el país está inmerso en una transición, ardua pero necesaria, hacia un modelo de crecimiento más sólido y de mayor calidad. La moderación de las tasas de avance se percibe como un subproducto de este cambio de modelo. La institución reconoce los esfuerzos del Ejecutivo en la moderación de vulnerabilidades como el endeudamiento y el sector inmobiliario, entre otros. Por último, dentro de las reformas de gran calado necesarias, menciona que son esenciales una política de «más mercado» en el sector financiero y equilibrar el terreno de juego entre las empresas públicas y las privadas.
El banco central chino sigue apoyando la economía. En este entorno de cambio de modelo y tasas de avance más moderadas, el banco central ha vuelto a recortar el tipo de interés (por cuarta vez desde noviembre) en 25 p. b., hasta el 4,85%. En la misma línea, también redujo el coeficiente de caja.
La India creció un 7,5% interanual en el 1T 2015. Aunque el dato es positivo, el avance del 4T 2014 se revisó sensiblemente a la baja (del 7,5% al 6,6%), lo que matiza el buen dato de principios de año. En este contexto, y ante la moderación de los precios, el banco central de la India redujo de nuevo el tipo de interés en 25 p. b., hasta el 7,25%. Un caso distinto es el de Brasil, cuyo banco central se vio obligado a subir el tipo de intervención a causa de la elevada inflación, todo ello en un entorno de crecimiento negativo.
Incertidumbre política en Turquía. Las elecciones legislativas del 7 de junio se saldaron con la victoria del Partido Islamista, liderado por Erdogan, que esta vez no obtuvo la mayoría absoluta. En consecuencia, se evitará que prospere la reforma constitucional propuesta que habría orientado a Turquía hacia un presidencialismo fuerte, pero también se complica la gobernabilidad del país. La bolsa y la lira acogieron los resultados con fuertes pérdidas. No obstante, tras la sorpresa inicial, los mercados financieros se recuperaron. A este cambio también contribuyó el buen dato del PIB del 1T 2015, cuyo crecimiento (del 2,3% interanual) fue superior a lo esperado.