Las oportunidades que brinda el sector del 'camping' en España
El camping ha sido tradicionalmente un modelo de alojamiento destinado a un turismo menos rentable y eminentemente doméstico, con un peso relativamente moderado en la industria turística. Sin embargo, con la pandemia, este modelo ha dado un vuelco y ha sido redescubierto por un gran número de viajeros, que se han encontrado con un sector modernizado, gracias a la fuerte inversión que se está llevando a cabo, y que ofrece una gran calidad, una oferta complementaria muy amplia y localizaciones atractivas. En este artículo, analizamos las últimas tendencias del sector y sus perspectivas.
El alojamiento constituye el principal sector dentro de la industria turística: en él se genera alrededor de un 21,5% del consumo turístico total en España. Dentro del alojamiento, la rama con mayor protagonismo es la hotelera, aunque tras el estallido de la pandemia otras han despuntado por su mayor potencial de crecimiento. Este es el caso del camping, que se está revelando como la rama de actividad con mejores registros tras la pandemia. Según los datos de la Encuesta de ocupación en campings que elabora el INE, el sector del camping está registrando unos crecimientos de demanda superlativos: en mayo, las pernoctaciones crecieron un 25,7% con respecto al mismo mes de 2019, gracias al buen comportamiento de la demanda doméstica, que alcanzó un crecimiento del 31,0% con respecto a mayo de 2019, y al dinamismo de la demanda internacional, que registró un incremento del 21,0% con respecto al mismo mes de 2019.
Sin embargo, cabe señalar que, si bien la demanda en los campings se ha comportado muy positivamente, no ha sido ajena a las tendencias macroeconómicas. Así, la demanda británica, que destaca como una de las más débiles cuando analizamos en conjunto el sector turístico en España, también ha sufrido considerablemente. A mes de mayo, se registraban aún caídas del 9,6% con respecto al mismo periodo de 2019.
El camping se está revelando como la rama de actividad con mejores registros tras la pandemia. En mayo, las pernoctaciones crecieron un 25,7% con respecto al mismo mes de 2019, gracias al buen comportamiento de la demanda doméstica
Al comparar estas cifras con la de otros modelos de alojamiento, se confirma que el crecimiento en el sector del camping ha sido diferencial. Tal y como se observa en el gráfico de la siguiente página, el volumen de pernoctaciones en campings en los primeros cinco meses del año 2023 se situaba un 29,0% por encima del nivel del mismo periodo de 2019. Por el contrario, en el mercado hotelero apenas observamos un crecimiento del 1,0%, cifras de por sí muy positivas, dado que apuntan a que el sector ha recuperado un nivel de demanda muy elevado, y más teniendo en cuenta que 2019 fue un año muy favorable para el sector. Algo similar ocurre con el mercado de apartamentos turísticos, que aún no ha recuperado los niveles de 2019.
El volumen de pernoctaciones en campings en los primeros cinco meses de 2023 se situaba un 29,0% por encima del nivel del mismo periodo de 2019
Las buenas cifras del sector del camping no se deben únicamente a que concentran una mayor demanda de turismo doméstico, que se recuperó antes y con más fuerza que el internacional. Tal y como se muestra en el gráfico de la siguiente página, es cierto que la demanda doméstica es el principal motor del sector, con un 56% de las pernoctaciones totales en el acumulado de los últimos 12 meses para los que tenemos datos disponibles (hasta mayo de 2023). Sin embargo, lo que revela esta cifra es que el peso de la demanda internacional es también muy relevante y que, además, se ha comportado de un modo mucho más positivo que en el sector hotelero para casi todos los mercados emisores. Entre los diferentes mercados, destacan emisores tradicionales, muy consolidados en los destinos españoles, como son Alemania y Francia, que aglutinan un 9,6% y un 8,7% de las pernoctaciones totales, respectivamente, y que registran crecimientos de más del 65,8% y del 24,5% en lo que llevamos de año con respecto al mismo periodo de 2019. También es destacable la preponderancia de los Países Bajos, que es el principal mercado emisor internacional del sector, con el 9,7% de las pernoctaciones totales (muy por encima del 3% en el mercado hotelero) y que además anota un crecimiento con respecto a 2019 del 28,3% en los primeros cinco meses del año. Por el contrario, la debilidad del mercado británico está siendo mucho más palpable en el camping, donde registra caídas del 19,8% (en el mercado hotelero, aunque poco, las pernoctaciones crecen).
Sin duda, las cifras del sector del camping tras la pandemia destacan, en términos generales, por positivas. Esto se ha debido a que, en las primeras fases de recuperación del turismo tras la pandemia, este gozó de un gran atractivo gracias a que los turistas buscaban destinos cercanos y con mayor distancia social. No obstante, el dinamismo del sector no ceja una vez superada la pandemia, lo que nos lleva a estimar que el crecimiento que hemos ido observando desde 2022 se apoya en factores más ligados a la competitividad del sector. En primer lugar, el descubrimiento de mercado del camping durante la pandemia por parte de clientes que anteriormente no lo habían considerado podría haber borrado algunos prejuicios hacia el sector y, con ello, habría ensanchado la base de clientes potenciales. En segundo lugar, el incremento de la demanda se ha dado en un periodo de gran transformación del sector, en el que se está profesionalizando su gestión y donde el ritmo de inversión ha aumentado muy significativamente, buscando mejorar la calidad de su oferta para poder competir por un mercado más amplio. El resultado ha sido que, tras la pandemia, una parte de los turistas no solo han hallado un tipo de alojamiento con una oferta atractiva, sino que lo han hecho en un momento en que su competitividad y calidad está en auge, lo que ha llevado a que el repunte puntual de la demanda durante la pandemia se haya convertido en algo mucho más estructural.
Una de las cuestiones que emerge de este análisis es saber cuál es el margen de crecimiento que se le presenta al sector. En retrospectiva, antes de la pandemia, este sector llevaba 20 años sin ganar peso dentro del mercado de alojamiento. Como mostramos en el gráfico siguiente, entre 2001 y 2019 absorbía entre el 8,2% y el 8,8% de la demanda total. Con el estallido de la pandemia, esta cuota de mercado se incrementó hasta el 15,0% en 2020, gracias a que rápidamente fue capaz de recuperar cotas de demanda doméstica similares a las de 2019. En los años posteriores, debido a la recuperación de la demanda turística en el resto del mercado de alojamiento, se observa una normalización de las cuotas de mercado del camping, que se sitúan en el 10,1% en 2022. Un registro que se mantiene estable cuando miramos los últimos 12 meses con datos disponibles (10,0% entre mayo de 2022 y abril de 2023).
De cara a los próximos años, sería de esperar que el sector continúe atrayendo a una porción mayor del mercado. Para saber hasta qué punto, es interesante hacer un análisis por territorio, en el que podemos observar algunos modelos a seguir y hacia dónde esperaríamos que tendiese parte del sector.
De cara a los próximos años, sería de esperar que el sector continúe atrayendo a una porción mayor del mercado del alojamiento
Como hemos apuntado, en el conjunto de España, el peso del sector del camping se sitúa en el 10,1% (datos de 2022). Por comunidad autónoma, encontramos seis casos en los que el peso se sitúa entre el 20% y el 25%. Además, no se trata de comunidades donde el sector turístico sea relativamente pequeño y poco competitivo en el que el sector del camping hubiera tenido más «sencillo» absorber una buena porción del mercado. Se trata de Cataluña, Murcia y la Comunitat Valenciana, que despuntan entre los destinos turísticos más desarrollados de España y Europa. Estos tres ejemplos ilustran que, con una buena gestión y una apuesta clara, el camping tiene capacidad para atraer a más mercado, sobre todo en comunidades autónomas donde su peso es algo menor, pero donde también se están registrando tasas de crecimiento muy abultadas. En este sentido, destaca el gran potencial de crecimiento que se presenta en Andalucía, donde el sector turístico está ya muy consolidado, y donde el camping está creciendo a gran velocidad (las pernoctaciones de 2022 se situaron un 25,5% por encima de 2019), pero aún presenta cuotas de mercado relativamente reducidas (8,6%). También es el caso en otras comunidades, donde el sector turístico goza de menor protagonismo, como Asturias, donde el sector del camping ya está relativamente consolidado (16,9% del mercado) o en Castilla-La Mancha, Castilla y León y Galicia, con un peso algo más reducido, pero con gran capacidad de crecimiento en turismo rural y de naturaleza, donde el camping tiene históricamente buen encaje.
Con una buena gestión y una apuesta clara, el camping tiene capacidad para atraer a más mercado, sobre todo en CC. AA. donde su peso es algo menor, pero donde también se están registrando tasas de crecimiento muy abultadas
En definitiva, el sector turístico español es diverso, y ahí reside una de sus grandes fortalezas. El desarrollo del sector del camping en España es una muy buena noticia para la competitividad de la industria turística, más aún sabiendo que este desarrollo nace de una modernización del sector muy profunda, tanto en su gestión (por la entrada de capital) como en su modelo de negocio (más colmado de oferta complementaria). De cara a los próximos años, esperamos que esta tendencia de crecimiento se consolide, generando oportunidades en destinos turísticos menos desarrollados y redistribuyendo mejor la generación de riqueza de la industria turística.